La Paz, 23 de septiembre de 2024 (BOLNEWS). –

La Paz, Bolivia – El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, expresó su enérgico rechazo al ataque perpetrado por seguidores de Evo Morales contra las instalaciones de la Unidad Educativa de la Armada Boliviana en La Paz, ocurrido la tarde de este lunes. En un mensaje difundido a través de sus redes sociales, Novillo informó que se presentará una denuncia penal para investigar los hechos y determinar responsabilidades.

“Denunciamos ante el pueblo boliviano que, tras finalizar la concentración de la marcha Evista, un grupo violento se dirigió hacia las instalaciones de la Unidad Educativa de la Armada Boliviana, donde apedrearon el inmueble, causando destrozos antes de darse a la fuga”, explicó Novillo.

Represión y Provocación

El ministro catalogó este ataque como una “acción vandálica de provocación premeditada” y destacó la reacción de los efectivos militares, quienes, en un acto de prudencia, no respondieron a la agresión y controlaron la situación sin utilizar la fuerza.

“Este hecho será denunciado a la Policía para que se realicen las investigaciones pertinentes”, aseguró el titular de Defensa.

Contexto de Violencia

El ataque tuvo lugar al finalizar un mitin de los seguidores de Evo Morales en el puente de la Cervecería en La Paz, como parte de una marcha que comenzó en Caracollo el 17 de septiembre, cuyo objetivo es forzar la habilitación de la candidatura del expresidente para las próximas elecciones.

Durante el ataque, una persona que se había refugiado en la entrada de la institución militar fue brutalmente golpeada por la turba. La víctima quedó tendida en el suelo con la cabeza ensangrentada, pero recibió auxilio por parte de los militares presentes.

Heridos en el Conflicto

Según un informe de la Defensoría del Pueblo, al menos dos personas resultaron heridas durante los incidentes en La Paz, reflejando un clima de tensión y violencia que se ha intensificado en las últimas jornadas.

El Gobierno ha reafirmado su compromiso con la paz y la seguridad, instando a la población a rechazar la violencia y promover el diálogo como la vía adecuada para resolver las diferencias políticas en el país. La situación continúa bajo vigilancia, mientras las autoridades trabajan para garantizar la seguridad y el orden público.