El gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, y el secretario de Salud y Desarrollo Humano, Edil Toledo, admitieron, por separado, que no se compró ni una sola vacuna contra la COVID-19, como se habían comprometido en la campaña y en el inicio de la gestión, en 2021.

Al calor de la campaña para las elecciones subnacionales del 7 de marzo de 2021, el candidato a la gobernación por Creemos, Luis Fernando Camacho, ofertó comprar vacunas anti COVID-19 para que “hasta el 24 de septiembre” de ese año todo el “pueblo cruceño (esté) vacunado”.

Apegado a su compromiso, una vez ganó la elección, remitió a la Asamblea Legislativa Departamental su solicitud para financiar la adquisición de los inmunizantes. Esta instancia dio curso a su pedido.

Luego de poco más de un mes de asumir la Gobernación, el propio Camacho promulgó el 12 de julio de 2021 la Ley Departamental 219 para la adquisición de vacunas contra la COVID-19.

La norma autorizó las “modificaciones presupuestarias” viabilizando la “adquisición de las vacunas por un importe de hasta Bs 54.000.000 (cincuenta y cuatro millones 00/100 bolivianos)”.

Además de ello, se aprobó y autorizó “las modificaciones presupuestarias para cubrir los gastos emergentes de la importación y adquisición de las vacunas contra la COVID -19” y también ordenó el diseño de un Plan Departamental de Vacunación.

Sin embargo, nada de ello se llegó a concretar. De hecho, el Gobernador reconoció que no se hizo la compra de las vacunas, pero no aclaró el destino de los Bs 54 millones.

“Hay que reconocer que el Gobierno Nacional ha cumplido con la provisión de las vacunas, haciendo innecesaria su compra por parte de la Gobernación”, admite Camacho en el informe de Rendición Pública de Cuentas Final Gestión 2021, presentado en marzo de este año y que está disponible en la web del Ejecutivo departamental.

A su vez, Edil Toledo, que sustituye en el cargo a Fernando Pacheco, hoy prófugo de la justicia y acusado de pedir “coimas” y “direccionar licitaciones”, dijo que no se compró la vacuna porque el Gobierno dotó las que se necesitaban para inmunizar al pueblo cruceño.

“A mí me tocó el trabajo de proveer las vacunas al departamento, el Ministerio (de Salud) cumplió y se entregó las vacunas adecuadas, entonces no había razón de ser de solicitar más”, explicó Toledo en entrevista con Asuntos Centrales.

El lunes, el ministro de Salud y Deportes, Jeyson Auza, preguntó al gobernador Luis Fernando Camacho qué hizo con los Bs 54 millones que solicitó para la compra de vacunas contra el COVID-19 y pidió a las autoridades competentes investigar el hecho.

Toledo indicó que a través de una petición de informe se explicó a los asambleístas del Movimiento Al Socialismo (MAS) que los recursos fueron utilizados para el fortalecimiento en los hospitales de tercer nivel y el sistema de salud, aunque no detalló la distribución para cada uno de los sanatorios.

Durante la entrevista con Asuntos Centrales, Toledo reveló que solicitó al gobernador de Santa Cruz una auditoría especial de la gestión 2021 y 2022, para conocer todos los procesos o licitaciones que se realizaron en los hospitales.

Indicó que tanto su persona como otros tres gerentes y el director del Sedes ya declararon por este presunto caso de corrupción.

“Tengo entendido que investigarán otros funcionarios más. Es especial, no somos expertos en esta situación donde hay una comisión de fiscales y policías, eso estresa al funcionario, hemos pedido un poco de paciencia y que colaboremos con la Fiscalía para que agilicen la investigación”, dijo.

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