La Cumbre del G7 comenzó en Kananaskis, Canadá, con llamados a desescalar el conflicto entre Israel e Irán. El presidente de EE.UU., Donald Trump, pidió retomar negociaciones, mientras líderes como Keir Starmer (Reino Unido) y Friedrich Merz (Alemania) coincidieron en la urgencia de frenar la violencia y aumentar la presión sobre Rusia por la guerra en Ucrania.

Otros temas abordados incluyen seguridad energética, inteligencia artificial e incendios forestales, según el primer ministro canadiense Mark Carney.