La Gobernación de Potosí declaró en emergencia el departamento tras los desastres naturales que han dejado un saldo de 9 fallecidos. Seis de las víctimas fueron arrastradas por ríos y tres más perdieron la vida debido a descargas eléctricas. Las inundaciones, granizadas y heladas han afectado a más de 33.000 familias y dañado 15.000 hectáreas de cultivos en 29 municipios, lo que ha generado graves pérdidas en la producción agrícola.

El Gobernador Marco Copa, acompañado por el secretario de Desarrollo Agropecuario, Gerardo Méndez, destacó que se requieren al menos Bs 71 millones para mitigar los daños y ayudar a los afectados. A pesar de los esfuerzos locales para proporcionar alimentos, maquinaria pesada y recursos, las autoridades solicitan asistencia del gobierno central para restaurar las áreas devastadas y apoyar a las familias en su recuperación.