La Paz, 29 de octubre de 2024 (BOLNEWS).-
En un tenso cierre de legislatura, la Cámara de Diputados rechazó el crédito de $us 75 millones para las obras del Bicentenario de Bolivia, en medio de protestas, bochornosos incidentes y un ambiente marcado por divisiones internas entre oficialistas y opositores. Sin embargo, el pleno sí aprobó su propio presupuesto institucional para 2025, que asciende a más de Bs 170 millones.
Incidentes en el pleno y enfrentamiento entre diputados
La sesión, convocada por el presidente de Diputados, Israel Huaytari, inició a las 14h00 y rápidamente se tornó caótica. Los diputados afines al expresidente Evo Morales, Gualberto Arispe y María Alanoca, subieron a la testera y arrebataron el micrófono a Huaytari, increpándolo para que no someta a votación el proyecto de crédito. En una escena de tensión, los “evistas” se unieron a la oposición para bloquear el tratamiento del crédito, evidenciando una insólita alianza que llevó al rechazo de la propuesta.
«Exigimos que este crédito no sea aprobado, porque no beneficia a los sectores más necesitados del país», manifestó Arispe al intervenir abruptamente en el debate. La toma de la testera es uno de los hechos más bochornosos que ha caracterizado a esta gestión legislativa, reflejando la profunda fractura al interior del Movimiento al Socialismo (MAS).
Oposición y división interna: el rechazo al crédito para el Bicentenario
El proyecto de crédito, que fue solicitado por el Consejo Nacional de Autonomías para financiar la implementación de plazas y museos con motivo del Bicentenario en 2025, fue rechazado con 32 votos en contra y solo 23 a favor. La votación reflejó la falta de consenso y la polarización entre los bloques legislativos: la oposición, integrada por Creemos y Comunidad Ciudadana (CC), junto con el ala “evista” del MAS, se opusieron al crédito, argumentando la falta de transparencia y prioridades en su ejecución.
Aprobación del presupuesto institucional y solicitud de recursos adicionales
Pese al rechazo del crédito, el pleno sí aprobó el presupuesto institucional plurianual ajustado (PIPA), el Plan Operativo Anual (POA) y el anteproyecto de presupuesto para la gestión 2025, con una base presupuestaria de Bs 170.832.522. No obstante, la Cámara de Diputados solicitó un adicional de Bs 22.127.178 al ministro de Economía, Marcelo Montenegro, para garantizar la sostenibilidad fiscal durante el próximo año legislativo.
«El presupuesto aprobado es insuficiente para cubrir las necesidades operativas y garantizar una gestión eficiente», advirtió Huaytari, justificando la solicitud de recursos adicionales al Ministerio de Economía.
Sesión de clausura y retos para la nueva directiva
El presidente de la Cámara de Diputados anunció que la sesión de clausura de la legislatura 2023-2024 se llevará a cabo entre el jueves y viernes de esta semana, poniendo fin a un año marcado por conflictos internos y la falta de acuerdos. La próxima semana se elegirá a la nueva directiva para la gestión 2024-2025, tanto en la Cámara de Diputados como en la Cámara de Senadores, en medio de incertidumbre sobre la cohesión política del bloque oficialista.
En contraste con la actitud de bloqueo frente a los créditos para obras nacionales, los legisladores avanzaron en proyectos de ley menores, como la delimitación de municipios y el reconocimiento de nuevas ciudades intermedias, temas que no generaron resistencia.
Contexto del conflicto político
La última sesión del año estuvo marcada por el debate sobre los bloqueos encabezados por seguidores de Evo Morales, que ya suman 16 días y continúan generando desabastecimiento en distintas regiones del país. La división al interior del MAS se ha acentuado, con un ala crítica al presidente Luis Arce que busca imponer la candidatura de Morales para las elecciones de 2025 y anular los procesos judiciales en su contra.
El bloqueo ha afectado gravemente la economía, generando pérdidas millonarias y afectando el abastecimiento de alimentos y combustible. «El país está siendo rehén de intereses políticos y ambiciones personales que no representan las verdaderas necesidades del pueblo boliviano», concluyó Huaytari en su intervención final.
