El ministro de Gobierno, Roberto Ríos, denunció este lunes que ciertas movilizaciones buscan interrumpir el proceso electoral y provocar la caída del Gobierno, sin representar verdaderas demandas ciudadanas.
“Estas protestas no son un ejercicio legítimo de derechos, sino intentos deliberados de alterar el orden democrático y frenar las elecciones”, afirmó Ríos en conferencia de prensa, asegurando que el Ejecutivo actuará con firmeza dentro del marco legal.
El ministro subrayó que las elecciones del 17 de agosto están plenamente garantizadas por la Constitución y advirtió que no se permitirá que intereses particulares intenten disfrazar acciones sediciosas como demandas sociales.
“El pueblo tiene derecho a elegir a sus representantes, y esa voluntad será respetada. Nuestra democracia nace del voto”, enfatizó, en referencia también a las recientes declaraciones del presidente Luis Arce, quien alertó sobre intentos de generar “caos organizado”.
Ríos informó que la Policía Boliviana fue instruida a actuar con proporcionalidad y respeto a los derechos humanos, pero también con firmeza para preservar la estabilidad del país.
Finalmente, advirtió que quienes promuevan la sedición o el sabotaje electoral enfrentarán consecuencias jurídicas, ya que el Estado cuenta con los mecanismos para hacer respetar el orden constitucional.
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