El Domingo de Ramos dio inicio a la Semana Santa en La Paz, congregando a cientos de fieles en la iglesia San Francisco. Entre oraciones, bendiciones y una feria improvisada de ramos elaborados con eucalipto y manzanilla, los paceños renovaron su fe en una jornada cargada de simbolismo. La celebración rememora la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén y da paso a una semana de reflexión espiritual que culminará con el feriado del Viernes Santo, dedicado al recogimiento y las tradicionales procesiones.