“Rechazamos todo anuncio de paro del Comité Interinstitucional, porque lo único que hará será perjudicar a los que queremos trabajar y sería catastrófico para nosotros”, indicó Enrique Aro, dirigente gremial del Plan 3000, en alusión a la medida de presión anunciada para esta semana.
Sería una medida sería “catastrófica”, dijo, porque muchas familias recién se recuperan de la crisis económica que dejó la pandemia del COVID-19 y otros paros que se realizaron en el oriente, dejándolos incluso en la bancarrota.
Aro dijo que con un día de paro en Santa Cruz el sector que representa pierde alrededor de 20 millones de bolivianos.
Los dirigentes gremiales se reunieron con los comerciantes de 16 mercados del Plan 3000, que alberga alrededor de 10.000 personas, quienes manifestaron su rechazo al paro para el 25 de julio.
“Acá apenas estamos sobresaliendo, como se dice subsistiendo del día a día porque tenemos créditos, tenemos deudas, cuentas por pagar y los paros lo que hacen es perjudicar y eso no está bien para nosotros”, insistió.
Reprochó que este Comité articulado por sectores opositores al Gobierno pretendan llevar adelante la medida de presión contra de la reprogramación del Censo de Población y Vivienda.