Centros de abasto abaratados, comercios con ventas intensas, y terminales terrestres y aéreas con gran movimiento marcan las fiestas de fin de año en Bolivia, resaltó este domingo el viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y del Consumidor, Jorge Silva.
Como es usual, dijo, las familias bolivianas se reúnen para despedir el año que culmina; aprovechan la ocasión para un reencuentro y, también, para darse un presente que van desde pequeños detalles hasta vehículos, para los cuales ahorraron todo el año.
Sólo en el sector público, por ejemplo, el Gobierno inyectó Bs 2.000 millones en el pago de aguinaldos, destacó.
“Una señal clara de que la economía es estable es la existencia del incremento de compra de bines inmuebles, es decir, casas y departamentos, también vehículos cero kilómetros, que se agotaron este fin de año”, ponderó Silva.
A diferencia de los otros meses, el trabajo del Viceministerio en diciembre es más intenso por las transacciones que se realizan.
En una evaluación, Silva dijo a Bolivia Tv que “los resultados alcanzados muestran un gran movimiento económico, tanto en mercados informales como formales, asimismo bastante abastecimiento de productos y la cotidiana elevación de precios ante la alta demanda, especialmente de la carne de cerdo”.
A la fecha, el Viceministerio recibió 500 reclamos por la venta de productos pasados y bebidas alcohólicas adulteradas o re envasadas.
En cuanto a los precios, Silva indicó que, dentro de los 35 productos más importantes de la canasta familiar como carnes, arroz, aceite, entre otros, éstos se mantuvieron estables y en otros bajaron.
El precio del kilo de la carne de pollo, por ejemplo, en Cochabamba pasó de Bs 15,50 a Bs 13,50; en La Paz está entre Bs 15 y 15,50.
Los viajes
Al igual que en los centros de abastos, desde antes de la Noche Buena, las terminales terrestres y aéreas del país reportaron un gran movimiento de personas.
Ante la gran afluencia y con el fin de realizar los controles sobre el precio de los pasajes y la atención, la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) movilizó a 230 funcionarios en todo el país.
El director de la ATT, Néstor Ríos, informó que sólo desde el 24 de diciembre se atendieron 2.939 casos: 2.035 corresponden a terminales terrestres y 604 en aeropuertos.
En terminales terrestres, detalló que el mayor problema es la venta de pasajes sin autorización de viaje para menores de edad sumando el 32%, seguido del incumplimiento de horarios por falta de planificación ante la alta demanda.
En tanto, la principal causa en aeropuertos fue la mala atención al cliente provocando el 67% de acciones correctivas por la falta de personal para atención cuando se registran retrasos o cancelación de vuelos, el trato no es oportuno ni amable; un segundo problema son vuelos demorados en un 19%.
“Las aerolíneas aéreas deben mejorar la calidad de atención al usuario en relación al personal operativo que se encuentra en aeropuertos”, recomendó.
