Para el analista José Pedro Ugarte, el Comité Cívico de Santa Cruz se va quedando solo en su afán de buscar la libertad de Luis Fernando Camacho mediante la protesta, ya que el cabildo nacional convocado para el 25 de enero solo busca politizar algo ilícito y estrictamente judicial.
“El cabildo se encuentra reconocido dentro del sistema de gobierno como forma de ejercer la democracia en Bolivia. Pero, lo que está ocurriendo en Santa Cruz es una suerte de distracción para poner a conocimiento de la sociedad algo ilícito y politizar un tema netamente judicial”, afirmó Ugarte.
Camacho fue aprehendido el 28 de diciembre de 2022 y guarda detención preventiva en el penal de Chonchocoro, La Paz, por el caso Golpe de Estado I. Desde entonces grupos radicales como la Unión Juvenil Cruceñista, que responden al Comité Cívico, generan violencia y siembran zozobra en la población cruceña.
“Recordar que, durante los 36 días de paro, ellos (el Comité Cívico) determinaron que toda Bolivia debería sumarse y todos los comités cívicos deberían sumarse a un paro y no tuvieron eco alguno, ellos están quedando cada vez más solos, por posiciones netamente políticas”, apuntó el analista.
Recalcó que Camacho está preso por los delitos que cometió en 2019, y que la postura que asumen sus allegados no responde a temas o intereses cívicas de reivindicación del departamento, sino busca mantener los privilegios de grupos selectos del oriente boliviano.
“El cabildo que pretende llevar Santa Cruz es distractivo, el resto del país no comparte esa posición”, recalcó Ugarte.
Cívicos de Cochabamba, Chuquisaca, La Paz y Oruro expresaron que no serán parte del cabildo del 25 de enero y afirmaron que la justicia no debe ser politizada para “tapar” actos vandálicos y de violencia.
