La Paz, 21 de noviembre de 2024 (BOLNEWS). –

En una jornada de tensiones y violencia, diputados y diputadas afines al ex presidente Evo Morales intentaron nuevamente obstaculizar el trabajo legislativo en la Cámara de Diputados, al tomar por la fuerza la testera e impedir la instalación de la sesión presidida por Omar Yujra, donde se debía conformar la directiva y las comisiones para la legislatura 2024-2025.

Los hechos se desencadenaron cuando un vaso con agua fue lanzado hacia Yujra, lo que generó un clima de violencia y caos. A partir de ese momento, los parlamentarios afines al Movimiento al Socialismo (MAS) y sus aliados intentaron, sin éxito, frenar el desarrollo de la sesión, a pesar de que existía una orden judicial que les prohibía acercarse a la testera y a los miembros de la nueva directiva.

«Queda aprobada la resolución camaral de conformación de comisiones y comités para la legislatura 2024-2025. Desde este momento, colegas diputadas y diputados deben ejercer sus labores a fin de tratar los proyectos de ley y los instrumentos camarales, en apego a la Constitución Política del Estado y las leyes vigentes», declaró Yujra, mientras los evistas continuaban con su intento de boicot.

La situación de confrontación física y verbal escaló rápidamente. En cuestión de minutos, los diputados evistas se agruparon y tomaron la testera, tratando de impedir que se instalara la sesión y que se diera inicio al trabajo legislativo, específicamente en la conformación de las comisiones que debatirán el Presupuesto General del Estado 2025, entre otros temas clave para la gestión del Gobierno.

Un episodio de violencia y desorden parlamentario

Este intento de obstaculizar la sesión no fue un hecho aislado. El 8 de noviembre, los mismos diputados evistas habían protagonizado un ataque contra el vicepresidente David Choquehuanca, suspendiendo la sesión de honor de la Asamblea Legislativa, donde el presidente Luis Arce debía presentar su informe de gestión.

A lo largo de la tensa sesión de este martes, que duró poco más de 30 minutos, se registraron empujones, gritos y amenazas. Tres diputadas de la bancada evista, apoyadas por otros legisladores, subieron a la testera, provocaron destrozos, rompieron documentos y hasta intentaron agredir al presidente de la Cámara de Diputados, Omar Yujra. Además, dos micrófonos fueron destruidos en un intento por sabotear el desarrollo de la sesión. Sin embargo, los parlamentarios que respaldan a Yujra, entre ellos el jefe de la Bancada del MAS, José Luis Flores, tomaron medidas para proteger la testera y garantizar que la sesión continuara sin interrupciones.

Llamado a la unidad y al trabajo por el país

A pesar de las agresiones y la violencia, Yujra cerró la sesión con un fuerte mensaje. «Estamos en un Estado de derecho donde los argumentos deben primar antes que la violencia. Estamos en la Asamblea Legislativa donde debemos debatir, no agredir», reflexionó el presidente de Diputados, rodeado de sus correligionarios. Hizo un llamado a la cordura y a que el debate parlamentario se conduzca por el camino de la democracia, y no por el de la violencia.

Yujra reafirmó que el trabajo de la Cámara de Diputados no se detendría por un grupo de parlamentarios y que, en todo momento, se priorizaría el bienestar y el desarrollo del país. «Un grupo de parlamentarios no nos va a detener en el trabajo de la Cámara de Diputados. El país está por encima de cualquier interés particular», enfatizó.

Responsabilidad legal y política

El jefe de la bancada del MAS, José Luis Flores, también expresó su preocupación por la situación, indicando que se tomarían acciones legales contra los diputados evistas responsables de los disturbios. Flores destacó que la conformación de la nueva directiva cuenta con el respaldo de la mayoría de los parlamentarios, lo que le otorga legitimidad al proceso. «Hoy estuvieron 104 diputados presentes, lo que le da legitimidad a esta convocatoria. Ya no hay nada que discutir, es hora de empezar a trabajar», declaró.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Diputados, Omar Yujra, advirtió que no permitirían más intentos de boicotear el trabajo legislativo y convocó a los diputados evistas al diálogo y a trabajar por el bienestar de la nación. «El país está por encima de una persona. Es hora de poner al país en primer lugar y trabajar para el pueblo», concluyó.

Este nuevo episodio de violencia y desorden en la Asamblea Legislativa pone en evidencia las profundas divisiones políticas en Bolivia, donde las fuerzas afines al ex presidente Evo Morales siguen intentando frenar el avance legislativo del Gobierno de Luis Arce. Sin embargo, la mayoría de los parlamentarios y el presidente Yujra se mantienen firmes en su postura de continuar con el trabajo parlamentario, en defensa de la legalidad y la democracia.

PL