El concepto de “persecución política” que repiten sectores de oposición, busca mantener la impunidad sobre las masacres de 2019 y dejar abierta la posibilidad para un nuevo golpe de Estado, dijo este jueves el vocero presidencial, Jorge Richter, quien caracterizó los momentos de ese proceso de ruptura institucional.

Richter, entrevistado en el programa Primer Plano, de Bolivia Tv, insistió en que las víctimas de las masacres y la democracia, exigen que la justicia esclarezca e investigue los sucesos violentos ocurridos en 2019. “Es una deuda del Estado”, manifestó.

Indicó que el discurso opositor sobre “persecución política” está “diseñado para lograr impunidad” y busca que no existan “responsables sobre los hechos de noviembre de 2019”.

“El concepto de persecución política busca dejar abierta la puerta a una posibilidad de que nuevas rupturas institucionales, nuevas posibilidades de golpe de Estado se puedan seguir implementando en Bolivia como un mecanismo que ellos encontraron importante, que lo aprendieron a utilizar para abreviar los tiempos de la secuencia constitucional”, sostuvo.

Richter cuestionó el papel del secretario general de la OEA, Luis Almagro, y dijo que sus declaraciones formaron parte de la primera fase del golpe de Estado de 2019.

Otra de las fases fue la construcción falaz de una supuesta sucesión constitucional, cuando no se cumplió la Constitución ni el reglamento del Senado. También citó otros capítulos como la candidatura de Jeanine Áñez, su prórroga en el gobierno de facto y la instrumentalización política de la pandemia del COVID-19.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *