Durante un acto por los 70 años de creación de la Central Obrera Departamental (COD) de La Paz, el presidente Luis Arce Catacora afirmó este viernes que los comités cívicos no representan al pueblo boliviano y quienes sí lo hacen son entidades como la Central Obrera Boliviana (COB).
“Como decía nuestro hermano secretario ejecutivo, en realidad, los comités cívicos y otras instituciones no representan al pueblo boliviano, es la Central Obrera Departamental, es la Central Obrera Boliviana la que representa al verdadero pueblo boliviano”, afirmó Arce.
En efecto, antes, el secretario ejecutivo de la COD de La Paz, Félix Nina Carrillo, señaló que para la clase obrera “no existen los comités cívicos y los conades” porque son “instituciones apócrifas que quieren llevar a la sombra una vez más al poncho, a la pollera, al guardatojo minero y al overol fabril constructor”.
Así, de manera explícita, Carrillo aludió al Comité Pro Santa Cruz que, a través del denominado Comité Interinstitucional, donde también se integró el gobernador Luis Fernando Camacho, decidió ir a un paro indefinido que se iniciaría a partir de este sábado 2 de octubre en esa región, en procura de que el Censo de Población y Vivienda se realice en 2023 sin considerar los aspectos técnicos que demanda es tipo de procesos.
La medida, que fue avalada en el cabildo del 30 de septiembre que contó con la presencia de 229.126 y no 1.530.000 personas como dijeron los cívicos, avanza con el apoyo del gobernador quien sería la traba para instalar el diálogo entre el Comité Interinstitucional con las autoridades de Gobierno, de acuerdo con el portavoz presidencial, Jorge Richter.
Esta nueva movilización fue atribuida por Carrillo a aprestos para “generar un nuevo golpe de Estado en el país”, como sucedió en 2019, cuando se produjo la ruptura del orden constitucional luego de protestas que precisamente alentó Cancho desde Santa Cruz y se propagaron a otras regiones del país con entidades como los entes cívicos.
“Enviamos un mensaje firme y conminatorio a las logias del Oriente de que no permitiremos que se repitan los hechos de 2019”, advirtió Carrillo.
Según el dirigente, la derecha boliviana “tiene rabia” de “que los nadie seamos dueños de nuestro destino y de los recursos naturales”.
Ante esas nuevas amenazas a la democracia, Carrillo instó a sus afiliados a “ser vigilantes ante cualquier intento de desestabilización de nuestro gobierno legítimamente electo” con el 55,11% de los votos en las elecciones generales del 18 de octubre de 2020.