El ministro de Salud y Deportes, Jeyson Auza, firmó convenios con los ejecutivos de la Universidad Privada Abierta Latinoamericana (UPAL) y la Universidad Técnica de Oruro (UTO) para que su personal académico y estudiantil se sume y coadyuve a la ejecución del plan piloto de vacunación masiva contra el COVID-19 en el departamento de Oruro.

“Vemos una universidad privada que oferta sus servicios al pueblo de manera totalmente desinteresada y gratuita. Vemos a la Universidad Técnica de Oruro que manifiesta, en palabras de su Rector, que ponen a disposición del Ministerio de Salud toda la infraestructura, sus profesionales y dos movilidades, para que puedan coadyuvar con esta actividad para nosotros, ese desprendimiento nos llena de alegría”, destacó, en un acto público.

Los convenios establecen que las universidades “se comprometen a coadyuvar con la participación de docentes, estudiantes y personal de sus distintas carreras, para la conformación de equipos inter y transdisciplinarios destinados a colaborar en la ejecución de la campaña de vacunación contra la enfermedad COVID-19”.

En su discurso, Auza resaltó que la campaña de vacunación masiva tiene hasta la fecha resultados “altamente positivos”, porque antes de su lanzamiento se tenía un promedio de vacunación de 8.000 dosis día y ahora se bordea las 38.000 dosis diarias administradas.

“Eso demuestra que si todos trabajamos en conjunto, las universidades, las instituciones, las autoridades, las alcaldías, las gobernaciones, vamos a poder dar respuesta a nuestra población. Si nosotros no vacunamos a toda nuestra población, vamos a darle la oportunidad al virus a que mute, nos afecte y nos genere otro problema”, puntualizó.

Por su parte, el rector de la UPAL, René Morales, manifestó que es necesario todo el aporte y el trabajo de las instituciones públicas, privadas y la población para vencer a la pandemia del COVID-19 y para ello ofreció todo el apoyo de esa casa de estudios superiores.

“Vamos a aportar a través de nuestras carreras de salud, de medicina, enfermería, tecnología y otras. Van a poder apoyar en la vacunación y sentimos que está logrando actualmente avances importantes que benefician a la población”, señaló.

A su turno, el rector de la UTO, Emilio Ismael Rojas, recordó que el departamento de Oruro estuvo en cuarentena rígida en 2020 y fue abandonado a su suerte por las autoridades circunstanciales de ese entonces, por lo que su población vivió momentos de desesperación, pero recordó que esa entidad académica logró salvar vidas pese a las limitaciones provocadas por la pandemia.

“Tenemos la obligación de ceder los ambientes que el servicio departamental de salud y el Ministerio de Salud requieran de la universidad y vamos a ayudar con nuestra Facultad de Salud, nuestra carrera de enfermería, tecnología, todo ese personal médico y de alumnos está a disposición de salvar vidas”, concluyó.

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